jueves, 7 de febrero de 2013

LA GRAN DISYUNTIVA


 
 
¿PSICOFARMACOLOGÍA O PSICOTERAPIA?

Tras realizar un diagnóstico clínico, una vez evaluado el paciente, nos planteamos unos objetivos terapéuticos y las intervenciones  más convenientes a llevar a cabo. Los criterios a tener en cuenta para evaluar la necesidad de aplicar tratamiento psicofarmacológico son los siguientes: qué naturaleza presenta el cuadro clínico, sintomatología que prevalece, intensidad y gravedad del cuadro en general, existencia anterior de tratamientos psicofarmacológicos que han sido efectivos, la necesidad de que los cambios se produzcan de manera más rápida.

Existen determinados trastornos en los que es más efectiva la combinación de farmacoterapia y psicoterapia, que la aplicación de cada una de ellas por separado. En otras ocasiones cuando se produce un agravamiento o estancamiento de un cuadro que está siendo tratado con psicoterapia, es recomendable aplicar tratamiento psicofarmacológico.

Pero no debemos olvidar nunca que, los mecanismos de acción de ambos tratamientos son iguales, de distinto modo, que es diferente la atribución del cambio en ambos. En el caso de los psicofármacos, son estos agentes externos los que lo producen, mientras que en las psicoterapias el cambio se halla unido a la acción del propio sujeto. Es por tanto, necesario por parte del profesional saber distinguir cuando es necesaria la aplicación de uno u otro tratamiento o la combinación de ambos.

La psicofarmacología, constituye una de las herramientas básicas empleadas por los psiquiatras, tiene una enorme influencia en el estado clínico del paciente y puede interaccionar con otras técnicas terapéuticas.

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